lunes, 5 de mayo de 2014

En paz

Fue hace mucho tiempo...


Se miraron por casualidad, la una de reojo, la otra descaradamente. Se descuidaron durante un segundo y sus miradas se cruzaron; se quedaron prendadas y luego se desprendieron, agotadas. No sonrieron, ni la más mínima mueca. Se dieron cuenta de que los años habían dejado huellas y de que, lamentablemente, se odiaban.

Y ya no importaba...

Siguieron su camino, sin voltear más de la cuenta, reprochándose en silencio las noches en las que la otra se iba con una mujer a nueva a un hotel, las mañanas en las que nadie hacía el desayuno y las tardes en las que se sentaban a ver el televisor sin recordar que la otra estaba en el mismo sofá. En silencio, lloraron, como si se tratara de una vieja herida.

... pero nunca dejó de doler.

Se dijeron adiós, sin mover la mano, sin gesticular. Voltearon al mismo tiempo sólo para encontrarse de nuevo con esa mirada. Sonrieron, como perdonando los años de mala compañía. Ahora podían estar en paz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario